sábado, 28 de marzo de 2015

EDUCAR RESPETANDO NUESTRO PLANETA


Es muy importante que los niños, desde muy pequeños, aprendan, a través de sus padres y sus educadores, a respetar y a valorar la naturaleza. El amor por la naturaleza les llevará a amar y apreciar el mundo natural y a actuar en correspondencia con estos sentimientos, contribuyendo a su cuidado y preservación.
Es necesario que los niños comprendan que la salud del mundo depende de todos nosotros, de lo que hagamos para conservar todo bien cuidado, bello y radiante. Hay que cuidar al mundo. La Tierra es nuestro planeta, cuidarla es nuestro deber.

Aprender a amar la naturaleza

El amor a la naturaleza en los niños

Para conseguir que los niños tengan amor por la naturaleza el mejor camino es enriquecer sus vivencias, planificar actividades con el objetivo de enseñarlos a amar elmedio ambiente, facilitar el contacto del niño con el campo, montañas, ríos, y todo lo que engloba la naturaleza, y darles la posibilidad de observar, preguntar, y expresar sus ideas en cuanto al tema.

El niño puede aprender a amar la naturaleza

- Teniendo contacto con ella siempre que sea posible
- En los paseos por el campo
- En excursiones a alguna granja
- Aprendiendo a plantar un árbol
- Aprendiendo a hacer un huerto
- Buscando y dibujando insectos, sus formas, sus colores
- Cuidando a una mascota
- Respetando a los animales, los ríos, a las plantas y sus flores
- Visitando a algún jardín botánico
- No echando basura en la calle, en el campo, ni en los ríos y mar
- Ahorrando agua y luz
- Siguiendo el ejemplo, el interés y el cuidado de sus padres por el tema

EDUCAR EN /CON VALORES

Nos preguntamos muchas veces por qué es importante y necesario que eduquemos a nuestros hijos a través de los valores. Educar a nuestros hijos para que aprendan a dar valor a algunas conductas y comportamientos les ayudará a convivir de mejor manera y a sentirse bien en el ambiente en que se encuentren.

Valores como la amistad, la comprensión, la tolerancia, la paciencia, la solidaridad y el respeto, son esenciales para un sano desarrollo de los niños.
Un niño que conoce el límite del otro, podrá vivir una vida sana y saludable, sea en su entorno familiar o escolar. Un niño que sabe respetar a los demás, será más fácilmente respetado, y así con todo.

Transmitir valores a los hijos

Niñas hacen pompas

Los valores son las reglas de conducta y actitudes según las cuales nos comportarnos y que están de acuerdo con aquello que consideramos correcto. Al nacer, los niños no son ni buenos ni malos. Con la ayuda de sus padres, educadores y de los que conviven con ellos, aprenderán lo que está bien y lo que está mal decir, hacer, actuar, vivir.
Pero, ¿cómo educar a los hijos en valores? Primero, conociendo cada uno de los valores. GuiaInfantil.com hizo una selección de los principales valores para que los padres hagan un repaso y luego se los enseñen en el día a día a sus hijos, y con ejemplos.
También es preciso recordaros que los niños aprenden con el ejemplo. El ejemplo que dan sus padres en su forma de relacionarse con los demás, de pedir las cosas, de compartir mesa, asiento, de cooperar, de ayudar a los demás, de defender, de reclamar, de tolerar y aceptar. Si los padres no tienen paciencia con su hijo, ¿qué creen que el niño va a aprender? La responsabilidad que tienen los padres en la transmisión de los valores a sus hijos es crucial.

Valores para educar a los niños


Amabilidad
El respeto a la diversidad
Obediencia
Amor a la Naturaleza
Amistad
Tolerancia
Bondad
Perseverancia
Respeto al bien común
Generosidad
Solidaridad
Honestidad
Gratitud
Confianza
Compartir
Colaboración
Coherencia
El ejemplo
Responsabilidad
Compasión
Organización
Paciencia
Empatía
Optimismo
Caridad
Perdón
Piedad
Fidelidad
Puntualidad
Coraje
Comprensión

LATERALIDAD CRUZADA

Podemos definir la lateralidad como la consecuencia de la distribución de funciones que se establece entre los dos hemisferios cerebrales. De dicha distribución depende la utilización preferente de un lado o el otro del cuerpo (derecho o izquierdo) para ejecutar determinadas respuestas o acciones.

La lateralidad es una función compleja que se deriva de la organización binaria de nuestro Sistema Nervioso. De hecho, gran parte de nuestro cuerpo se articula de forma doble: dos ojos, dos oídos, dos orejas, dos pulmones, dos riñones, etc... Nuestro cerebro igualmente dispone de dos estructuras hemisféricas especializadas y que son las responsables de controlar todo el complejo sistema dual, integrando la diferente información sensorial, orientándonos en el espacio y el tiempo y, en definitiva, de interpretando eficientemente el mundo que nos rodea.

A su vez, los hemisferios presentan lateralización cortical, es decir, especialización en ciertas funciones cognitivas.
Tradicionalmente se ha asociado el hemisferio izquierdo con la zona que procesa de forma verbal, lógica, secuencial. Por su parte el hemisferio derecho es más intuitivo, menos racional, global, creativo, más capaz con las relaciones espaciales y el procesamiento simultáneo de la información.

La asociación lateralidad-lateralización hemisférica sigue siendo muy controvertida debido a que, si bien, la sensibilidad corporal y la motricidad de las partes derecha e izquierda del cuerpo están directamente relacionadas con el hemisferio contralateral (el izquierdo controla la parte derecha del cuerpo y el derecho la parte izquierda corporal), no sucede lo mismo con la visión y la audición donde cada receptor envía información simultánea a ambos hemisferios. Además hay que contar con el cuerpo calloso que sirve de vía de conexión interhemisférica y, por tanto, facilita la comunicación entre ambos.

Sea como fuere, no hay duda que una lateralidad bien establecida es un factor facilitador de los diferentes aprendizajes (a partir de los 4-5 años), siendo un factor de riesgo en caso contrario.

2- Tipos de dominancia y lateralidad

Normalmente se diferencian cuatro tipos de preferencia o dominancia:

Dominancia Manual: Preferencia o mayor facilidad para utilizar una de las manos (derecha o izquierda) para ejecutar acciones como coger objetos o escribir.

Dominancia Podal: Nos indica el pie dominante para efectuar acciones como chutar una pelota, mantenerse en pie con sólo una pierna, etc...

Dominancia Ocular: Aunque los dos ojos son necesarios para configurar una imagen correcta, hay uno que se prefiere para mirar por un catalejo o apuntar con una carabina, se trata del ojo dominante.

Dominancia Auditiva: Se refiere a la preferencia o tendencia a escuchar más por un oído que por el otro, por ejemplo, al coger un auricular, un teléfono móvil.

Hablamos de lateralidad homogénea cuando mano, pie, ojo y oído ofrecen una dominancia en el mismo lado ya sea en el lado derecho (diestro) o izquierdo (zurdo).

Estamos ante una lateralidad cruzada cuando existe una lateralidad distinta de la manual para pies, ojos u oídos (por ejemplo mano derecha dominante con dominio del ojo izquierdo). En estos casos también se habla de “asimetría funcional”.
La lateralidad cruzada mano-ojo, ha sido una de las más estudiadas y con frecuencia es sinónimo de problemas en el aprendizaje, en especial en los procesos de lectura y escritura.

En ocasiones se utiliza el concepto de lateralidad contrariada para expresar que el niño ha invertido en algún o algunos miembros su tendencia natural (por ejemplo niño zurdo que se le ha forzado ha aprendido a escribir con la derecha).

Hay también otras posibilidades como la denominada lateralidad mixta que se utiliza para designar a aquellos individuos que presentan heterogeneidad en alguna o todas las lateralidades (p.e. algunas actividades se realizan con una mano y otras con la contraria), también el ambidextrismo que señala a aquellos sujetos que son igualmente hábiles con cualquiera de las dos partes del cuerpo (derecha-izquierda) para efectuar algunas actividades.

3- Su Desarrollo

Hasta los 4 o 5 años no tiene demasiada importancia conocer donde están la derecha y la izquierda. El niño va desarrollándose según su curso evolutivo y todavía resulta innecesario el conocimiento del espacio codificado según las coordenadas derecha-izquierda. El espacio lo percibe el niño directamente.

Las cosas empiezan a cambiar cuando se inicia el aprendizaje formal y en concreto el de la escritura y la lectura. Ahora el niño se va a encontrar con unos símbolos (letras y números) cuyas coordenadas espaciales y temporales le van a marcar su significado. El control, por tanto, de dichas coordenadas supone un paso previo fundamental para la comprensión de los mismos.

4- ¿Qué determina la lateralidad?

Los factores que intervienen en una buena organización lateral son muchos. A continuación se describen los más importantes:

La información genética. La influencia del entorno (medio cultural, costumbres...).La educación y aprendizaje recibido.
En la construcción de la lateralidad, siempre que no haya factores patológicos, se ha constatado un predominio de un cierto determinismo genético. Así algunos estudios apunta que la posibilidad de tener un hijo zurdo siendo ambos progenitores diestros es de un 9,5% aumentando esta cifra al 26% si ambos padres son zurdos.

También está probada la influencia de factores ambientales o sociales. En este sentido se apunta a que los niños ya desde muy pequeños suelen recibir los objetos dirigidos a la mano derecha por parte de los adultos. Además muchos de dichos objetos están hechos para ser manipulados por diestros.

Una de las actividades donde más se refleja la influencia social es en la escritura manuscrita. En las sociedades más conservadoras, en las que se prohíbe la escritura con la mano izquierda, el porcentaje de zurdos puede situarse entorno al 4 o 5%.

5- Porcentaje de zurdos en población adulta*

 ManosEscrituraPiesVistaOído 
Hombres10,039,9220,4528,8740,89 
Mujeres7,969,1813,8329,1729,67 
       
Los resultados de este estudio apuntan a una prevalencia de zurdos manuales del 9-10% aproximadamente y no es siempre coincidente con la mano que se escribe. En la vista y el oído el porcentaje aumenta considerablemente. Una de las conclusiones a extraer es que la población adulta normal presenta frecuentemente una lateralidad cruzada entre diferentes partes del cuerpo.

6- Lateralidad y Aprendizaje

Los niños que presentan una lateralidad homogénea ( mano, pie, ojo, oído dominantes en el mismo lado), tradicionalmente se ha creído que tienen una mejor disponibilidad para el aprendizaje al poder integrar de forma más eficaz la diversa información sensorial. Esto puede resultar cierto en muchos casos pero no en todos. No puede establecerse de manera concluyente una relación efecto-causa entre la presencia de una lateralidad no homogénea y la de trastornos del aprendizaje. Sin embargo, debe evaluarse la lateralidad como un factor de riesgo añadido a otros factores.

Diferentes estudios efectuados comparando el porcentaje de disléxicos de la población general con el porcentaje en grupos de zurdos manuales, de individuos con lateralidad cruzada o de zurdos de la mirada, dan como resultado un mayor porcentaje en estos grupos que en población normal.
Es a partir de la Educación Primaria cuando el niño con una lateralidad mal establecida puede presentar dificultades específicas en el aprendizaje. 

OBLIGAR A ESCRIBIR CON MANO DERECHA????

Un niño al que se le ha forzado a utilizar la mano contraria a su lado dominante, o que no acaba de definirse como diestro o zurdo hacia los 4 ó 5 años, es un niño con un sistema nervioso desorganizado. Su cerebro ha de estar organizado para que él pueda organizarse a su vez en el espacio en el que se mueve y sobre el papel en su trabajo escolar.

La lateralidad es la función que hace posible que nos orientemos en el espacio y en el tiempo, y por tanto, nos permite entender y manejar los códigos escritos (letras y números). Sin unas coordenadas bien establecidas, no podríamos orientar los símbolos cuyo significado depende de la forma que tienen y el lugar que ocupan en el espacio y el tiempo, así podrían surgir confusiones entre "23" y "32" ó "SE" y "ES", por ejemplo.

El Sistema Nervioso necesita funcionar como un sistema jerárquico en el que cada parte tiene su cometido y en el que todas las partes trabajan juntas aportando cada una su función para obtener resultados eficaces con un mínimo esfuerzo. Esto es necesario para que el Sistema Nervioso pueda procesar todos los estímulos que le llegan de forma constante. En todo momento estamos recibiendo una gran cantidad de información de nuestros sistemas sensoriales y usamos esta información para regular nuestro comportamiento e interactuar con el mundo.

ZURDO/DIESTRO/ JAMÁS CORREGIRLO

Niños zurdos. Escribir con la mano izquierda

El niño es diestro o zurdo desde el momento en que nace

Los estudios indican que entre un 12 y un 15 por ciento de la población mundial infantil es zurda. También revelan que el fenómeno de la zurdera es más común en los varones (el 11%) que en las mujeres (el 9%), sin que esté determinado el por qué.
Una persona zurda es la que tiene preferencia por usar la mano izquierda para una variedad de acciones como coger, alcanzar, echar, jugar, señalar, escribir y manipular.
También incluye una predilección por preferir el pie izquierdo para dar el primer paso para caminar, montar en triciclo, patear una pelota, saltar a la comba, etc. Por norma general, ser zurdo significa tener en algún grado un dominio del lado derecho del cerebro. Hace años, un niño zurdo no era visto con normalidad. Se pensaba que la zurdera era un problema de salud. Hoy en día, ya se sabe que la zurdera no es una enfermedad. Es apenas una característica del niño que no se puede ni se debe corregir.

Cuándo se detecta la zurdera infantil

niños y niñas zurdos

Normalmente es en la escuela que se detecta que un niño es zurdo, porque es cuando él empieza a utilizar las manos con más frecuencia. Hasta los 3 o 4 años, los niños utilizan las dos manos indistintamente. Para comprobar si un niño es zurdo o diestro hay que observar qué mano, pie u ojo utiliza él cuando:
- Chuta un balón
- Se peina
- Lleva un vaso
- Salta a la comba
- Tapa o destapa un frasco
- Mira por un caleidoscopio
- Escribe
- Hace una foto
El ojo, la mano o el pie elegido naturalmente para realizar las acciones suele ser la dominante.

El niño ya nace diestro o zurdo

Un niño es zurdo no porque él lo decidió así. Los expertos confirman que una persona es diestra o zurda desde el momento en que nace. Muchos padres se preguntan si existen técnicas para que puedan cambiar el dominio de la mano izquierda de su hijo para la derecha, como si eso se tratara de una decisión del niño o de la niña. El dominio de la mano, sea derecha o izquierda, lo determina el cerebro.
El lado derecho controla la mano izquierda y el izquierdo la mano derecha. Por esta razón, a un niño zurdo no se le puede obligar a que escriba con la mano derecha. No existe entrenamiento alguno que lo haga cambiar. Por muchos esfuerzos que se haga, el niño seguirá tendiendo a usar su mano izquierda para la realización de acciones ya que esto es parte de su naturaleza y no de un hábito o una costumbre que él haya adquirido. Si se obliga a un niño a utilizar la mano más débil y menos hábil en la realización de las tareas, los resultados pueden ser frustrantes para él. Le agotará sin razón y le hará más torpe.
Cambiar las preferencias laterales del niño conlleva desventajas como dificultades para distinguir la derecha de la izquierda, trastornos en la escritura, dislexia e inclusotartamudez. La principal preocupación que existe en cuanto a la zurdera es de adaptabilidad de los niños a un mundo hecho en su mayoría para los diestros.

CONSEJOS PARA EDUCAR


Más de 20 consejos con los que lograrás ser un buen ejemplo para tus hijos

Más de 20 consejos con los que lograrás ser un buen ejemplo para tus hijos

Todo los que los padres dicen o hacen sirve de referencia a los hijos

Cuando unos padres llegan con su hijo recién nacido a casa, el pequeño tiene todo por aprender. O, visto desde el otro lado de la barrera, los padres tienen todo por enseñar a su pequeño.
Lo cierto es que, a partir de ese momento de encuentro, y sobre todo en los primeros años de la infancia, los padres son una referencia absoluta para los niños y todo lo que hagan o digan lo harán porque lo han aprendido en casa. Son un modelo a seguir. Por eso los expertos en familia aseguran que los progenitores no se pueden llevar las manos a la cabeza porque sus hijos gritan, cuando los padres también lo hacen.
Según Tania García, fundadora de Edurespeta y experta en Educación Respetuosa y asesora familiar, recomienda a los padres seguir los siguientes consejos para ser un buen ejemplo para los hijos:
—Para que tu hijo no se comunique a gritos: no le GRITES
—Si deseas que tu hijo sea lector: lee con él y que te vea leer
—Si te gustaría que un futuro fuera un adolescente que tomara sus propias decisiones: INTÉGRALO en la toma de decisiones de tu hogar y toma las tuyas propias con DECISIÓN
Si no quieres que te pegue a ti y/o a los demás: no utilices la VIOLENCIA con él
—Si anhelas que tu hijo confíe en ti en todas las situaciones de su vida: CONFÍA en él
—No pretendes que te insulte ni a ti ni a nadie: no le INSULTES, nunca
—Para que tu hijo te bese y te abrace, aunque los años pasen: BÉSALO y abrázalo cada día.
—Te entristecería que se riera de los demás: no te RÍAS tú de él.
—Para que tu hijo sepa disfrutar de la vida: DISFRUTA de la vida con él, en todo momento.
Si no deseas que sea una persona llena de miedos: no le eduques mediante MIEDOS y amenazas.
—Pretendes que tu hijo sea sincero: no le MIENTAS, en ninguna situación.
—No quieres que haga juicios de valor a las personas: no le JUZGUES.
—Bajo ningún concepto quieres que tu hijo sea sumiso ni un títere de los demás: no le enseñes bajo la OBEDIENCIA ciega.
—Te gustaría que tu hijo tenga claro lo que quiere y luche por ello, sin necesitar el beneplácito de nadie, ni nada a cambio: no le eduques con PREMIOS, la vida no funciona con recompensas.
—Deseas que tu hijo te comprenda y empatice con los demás: sé EMPÁTICA con él, ponte en su lugar.
—No quieres que tu hijo etiquete a las personas: no le ETIQUETES tú.
—Aspiras a que tenga sus propios gustos: no IMPONGAS los tuyos a los de él.
—Prefieres un hijo integrado en la sociedad: no le dejes solo nunca cuando te necesite, acompáñalo.
—No te gustaría que tu hijo chantajeara ni coaccionara a los demás: no le CHANTAJEES, bajo ningún concepto.
—Quieres que disfrute comiendo y se atreva a probar todo tipo de comida: no le FUERCES a comer y respeta sus ritmos.
Si no quieres que tu hijo te «castigue» (de diferentes formas): no utilices el CASTIGO en su educación.
—Nunca quisieras que tu hijo obligase a alguien a hacer lo que no quiere: jamás le OBLIGUES tú.
—No deseas que te compare con la madre de su amigo, pensando que es mejor: no le COMPARES nunca.
—No disfrutarías si se dejase pisar: no le PISES.
—Quieres que tu hijo sea feliz: sé FELIZ y hazlo con él.